NOS ESTAMOS VOLVIENDO LOCOS.
Mes de diciembre, acabamos de salir de la fiesta importada, de los gastos de Halloween, de preparar los disfraces de exaltación a la muerte, en todas sus versiones, de cabezas cortadas, cuchillos hundidos en el cráneo, sangre por todos lados y truco o trato.
Respetando, vaya por delante, a todas las personas aficionadas a dicha celebración, a mi, personalmente, me parece horrorosa, tiempo de honrar y recordar a nuestros difuntos, a nuestros seres queridos, con este tipo de fiestas y manifestaciones, que para nada tienen que ver con nuestra cultura.
Pero bien, ya pasó, con los extras económicos para las familias con niños y sin ellos. Unos días y el consabido Black Friday , venga vamos, otra moda anglosajona y a gastar, no sea que se te eche encima el Cyber Monday, sin comprar nada.
Estas políticas consumistas, están acabando con la economía, en muchas familias de clase media que no llegan a final de mes, pero que se ven arrastradas por las campañas publicitarias a lo bestia, que inundan nuestro hogares y nuestros dispositivos móviles.
Desde mi humilde opinión, nos estamos dejando llevar por estrategias publicitarias, en inglés, claro, que nos hacen daño y para nada tienen nada que ver con nuestras queridísimas rebajas de toda la vida.
Llegamos a Navidad, muchos con el bolsillo vacío y enfados familiares , mal humor.
Un consejo, reservar las ilusiones, regalos y alegrías, para las fiestas. Que el exceso consumista, no nos amargue estos días. Da igual la cena, da igual el regalo, me gustaría pensar que todavía priorizamos la compañía de familiares y amigos, el hecho de compartir momentos, abrazos, no hay nada más barato que abrazar y besar.
A través de mi blog, os deseo a todos mis lectores unos días llenos de amor y de paz, sin olvidarnos de nuestros hermanos de Valencia y Letur, de tantos afectados por la Dana, que este año desearían tener un hogar y no haber perdido a sus gentes. De los países en guerra, de los niños sin juguetes, peor aún, sin sonrisa.
Vayan para todos ellos, un abrazo universal, de todas las personas de paz. Recuperemos el sentido estas fiestas de amor, esperando Enero con la ilusión de la venida de sus majestades Los Reyes Magos de Oriente, tan nuestros, tan queridos, tan soñados. Que en este venidero 2025 se lleven el barro de las calles, el dolor de quienes lo han perdido absolutamente todo, consuelen a las víctimas y secuestren las bombas, fusiles, misiles, que tanta destrucción están causando en el mundo.
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